Son las 7 de la mañana y te preparas para ir al trabajo. No
tienes coche y coges el autobús. Un medio de transporte que mueve vidas,
personas que compartirán momentos o que quizás lo cogen con el mismo fin, ir al
trabajo, pero llevan una vida totalmente diferente a la tuya. ¿Alguna vez te
has parado a pensar las vueltas que da la vida y que quizás la persona que
tienes sentada a tu lado, la cual no conoces absolutamente de nada, esté de una
manera u otra conectada a ti?
En la vida tomamos decisiones y todas nos han
llevado a acabar como estamos en este mismo momento, pero ¿y si en vez de
mudarnos a la sierra nos hubiésemos mudado a la playa? O ¿y si en vez de salir
con aquel chico, le hubiésemos rechazado? ¿Seríamos nosotros mismos los mismos
que somos ahora?
Yo creo que no.
Cada acción o decisión que tomamos a lo largo de nuestra
vida nos ha hecho ser quienes somos, nuestros enfados con amigos, nuestras
discusiones con la familia e incluso con nuestros ex’s y nuestras parejas
actuales.
La familia no la elegimos, nacemos de manera aleatoria en la
que nos toca y ellos nos hacen crecer de manera diferente, ya que nunca nos
podremos alejar de ellos y nos querrán siempre.
Pero, sin embargo, los amigos y
la pareja, son la familia que escogemos y por ellos, las decisiones que hemos
tomado, igual no siempre han sido las acertadas y nos hemos equivocado una que
otra vez, pero hemos aprendido a no cometer los mismos errores en la vida. Con
tus amigos puedes discutir y volverte a reconciliar, o puede ser que ya no
quieras compartir tu vida con ellos porque esa etapa ya haya finalizado y es
tan simple como decirles adiós.
A tu pareja, habrá veces que la escojas mejor o peor, pero de cada uno aprendemos igual, aprenderemos lo que cada uno quiera enseñarnos, y de el porqué de que acabara la relación para no volverlo a cometer.
A tu pareja, habrá veces que la escojas mejor o peor, pero de cada uno aprendemos igual, aprenderemos lo que cada uno quiera enseñarnos, y de el porqué de que acabara la relación para no volverlo a cometer.
Puede ser que hagamos cosas mal en nuestra vida, muchas
seguro, pero esto es lo que nos hace aprender y llegar a ser quienes somos. No digo que, en mi
caso, me arrepienta de lo que he hecho mal, ni mucho menos.
He cometido muchísimos errores en mi vida, en los que según
avanzo en ella intento arreglarlos, nunca se puede volver a atrás, pero es tan
simple como hacer las cosas de diferente manera. Si antes no dio resultado una
acción ¿porqué repetirla?, hay que cambiar y cambiar a mejor.
La gente me puede etiquetar de insensible, de idiota, de
cabezota o incluso en algunos casos acusarme de buying, pero creo que decir la
verdad después de un gran desengaño es parte del cambio, no puedes callarte. Si
quieres arreglar algo que se ha roto, esconderlo no vale de nada, hay que
enfrentarse a ello y arreglarlo. Y eso forma parte de mi visión de cambiar, de
cambiar a mejor, porque decir la verdad duele, pero prefiero ser sincera con el
mundo y que me tachen de insensible a tener que estar sonriendo a quien me hace
daño y que me tachen de hipócrita.
La vida da muchas vueltas, y quien ahora te quiere igual
mañana te odia. Y quien hoy se sienta contigo en el autobús, quizás no sea
nadie, pero quizás, solo quizás, sea alguien importante en el futuro, todo
depende de lo que hagas tu vida, Solo tenemos una y tenemos que saber
utilizarla.
Interesante reflexión...
ResponderEliminarGracias! :)
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